Menopausia: lo que toda mujer debe saber

El cese de la menstruación se debe a cambios hormonales, que contribuyen a un aumento del peso corporal. Este proceso se debe a un cambio en la velocidad de los procesos metabólicos en el cuerpo. Como resultado, la misma cantidad de alimento que antes se absorbe mejor y aumenta de peso. Además, los sofocos y otros síntomas de la menopausia no favorecen la actividad física. Teniendo en cuenta estos factores, es necesario optimizar la nutrición y la actividad física. La primera recomendación está dirigida a prevenir el aumento de peso. Se recomienda renunciar al uso de harinas, alimentos dulces, fritos y grasos, carnes grasas y quesos grasos, comida rápida - comida rápida. El menú diario debe incluir: requesón, kéfir o yogur, frutas y verduras, hierbas, pan o cereales integrales, pescado, legumbres, carne de pollo o pavo, ternera magra. Se recomienda que, teniendo en cuenta su salud general, beba alrededor de 1,5-2 litros de líquido al día. Pero los jugos, la leche, el kéfir y las bebidas de frutas son más alimentos que bebidas, ¡ya que contienen calorías! Y, por supuesto, la actividad física es absolutamente necesaria (caminar, nadar, aeróbic acuático, etc.).

Si los sofocos después de la menopausia interfieren con la vida, se deben tomar medidas que estén determinadas por la gravedad de las violaciones.

Todo depende de su frecuencia y duración. Si se trata de varios sofocos al día y duran varios minutos, solo necesita cambiar su estilo de vida. Se recomienda evitar el estrés, reducir el estrés, tratar de no beber té y café fuertes, beber más agua, incluidos los tés de hierbas, limitar la ingesta de alcohol, no fumar, evitar también las habitaciones congestionadas, caminar al aire libre durante al menos 30 minutos al día. La ropa y la ropa de cama deben estar hechas de materiales naturales. También se utilizan una ducha de contraste y otros tipos de balneoterapia, masajes reparadores y relajantes. La ingesta de remedios homeopáticos o de hierbas que contengan fitoestrógenos durante tres a seis meses también puede aliviar los síntomas del síndrome climatérico.

Una de las manifestaciones de la menopausia es también un cambio de apariencia, que a menudo preocupa a las mujeres. Aparecen arrugas y manchas de la edad en la piel, el cabello se adelgaza y se vuelve opaco, las uñas se rompen. Estas manifestaciones también son consecuencia de la falta de bullicio sexual femenino. Es la deficiencia de estrógenos la que determina toda la variedad de síntomas de la menopausia. Si los cambios asociados con el inicio de la menopausia se refieren solo a la apariencia, entonces puede contactar a un esteticista, pero si aparecen otros síntomas del síndrome climatérico, no será superfluo contactar a un ginecólogo-endocrinólogo.

El tratamiento del síndrome climatérico es complejo. Existen varios enfoques fundamentalmente diferentes para reducir la gravedad de los síntomas.

El primer enfoque recomendado para todas las mujeres, sin excepción, es un estilo de vida saludable con una nutrición adecuada, actividad física, sueño adecuado, el uso de suplementos de vitaminas y minerales y procedimientos de fisioterapia.

El segundo enfoque se basa en el uso de medicamentos destinados a tratar otras enfermedades para reducir la gravedad y frecuencia de los sofocos y cambios de humor, la depresión, la corrección de la presión arterial, la dislipidemia y prevenir desastres cardiovasculares: ataques cardíacos, accidentes cerebrovasculares, así como medicamentos para la prevención y el tratamiento de la osteoporosis. (prevención de fracturas).

El tercer enfoque es el uso a corto plazo de preparaciones a base de hierbas con efectos similares al estrógeno: fitoestrógenos. Estos medicamentos reducen algo la gravedad de las manifestaciones de la menopausia, pero, ¡ay! No hay observaciones a largo plazo sobre su seguridad, por lo que su designación independiente y uso incontrolado pueden tener consecuencias indeseables.

Cuarto enfoque- La terapia de reemplazo hormonal de la menopausia es el método más eficaz para tratar la mayoría de las manifestaciones de la menopausia. Incluye el uso de estrógeno (estradiol) y progesterona (en el caso de un útero extirpado, solo se usa estrógeno) y solo puede ser recetado por un médico después de un examen especial. Si bien la terapia de reemplazo de la menopausia hace frente bien a las manifestaciones de la menopausia (sofocos, sudoración, problemas para dormir, sequedad y malestar vaginal, cambios de humor) y también reduce el riesgo de osteoporosis, en algunas mujeres puede aumentar el riesgo de trombosis, ataques cardíacos, accidente cerebrovascular, cáncer de mama, enfermedad de la vesícula biliar. Se ha comprobado que en esos casos se observa la mínima cantidad de efectos secundarios y efectos negativos sobre la salud cuando la terapia se inicia antes de los 60 años. Es importante usar medicamentos y enfoques que minimicen la dosis de estradiol (medicamentos que ingresan al cuerpo a través de la piel: parches y geles) y usar un progestágeno seguro.

Además, se pueden usar agentes que reduzcan las manifestaciones de sequedad vaginal, malestar vaginal y malestar durante las relaciones sexuales (lubricantes) o cremas, supositorios, tabletas y anillos que contienen estrógenos que se colocan dentro de la vagina (aquí se necesita la recomendación de un médico).

Para tomar una decisión sobre la terapia menopáusica (hormonal) de reemplazo, debe consultar a un médico y someterse al examen necesario, que debe incluir un examen de ultrasonido de los órganos pélvicos, las glándulas mamarias y / o una mamografía. Al mismo tiempo, el médico evalúa y analiza los beneficios y riesgos de la terapia hormonal y determina el enfoque terapéutico óptimo. La edad es uno de los factores importantes; no se recomienda comenzar dicho tratamiento después de los 60 años. El segundo factor importante es la presencia o ausencia del útero (muchas mujeres se someten a una cirugía para extirparlo en el período de la menopausia). Otro factor es la herencia para el cáncer de mama (la presencia de mujeres en la familia que han sido diagnosticadas con cáncer de mama), por lo que se puede verificar un marcador de cáncer de mama (CA 15-3). También controlan el estado del hígado y del sistema de coagulación sanguínea (es importante que la mujer no tenga antecedentes de trombosis y tromboembolismo). En el futuro, los exámenes enumerados deben repetirse anualmente, ya que el medicamento hormonal se prescribe durante mucho tiempo.

Ahora se ha demostrado que lo óptimo y seguro son los medicamentos que aseguran la administración de la forma farmacéutica no a través del tracto gastrointestinal, sino a través de la piel (geles transdérmicos, parches), ya que evitan el complejo gastrohepático y la etapa del metabolismo en el hígado. en el que se forman factores protrombóticos que aumentan el riesgo de tromboembolismo.

La elección del segundo componente de la terapia de reemplazo, el progestágeno, es necesaria para todas las mujeres con útero preservado y también se basa en principios de seguridad. Actualmente, las formas micronizadas de progesterona y didrogesterona se reconocen como las más seguras. Se ha comprobado que estos fármacos en particular minimizan el riesgo de desarrollar cáncer de mama, lo que sin duda es un argumento importante.

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