Menopausia y pérdida de colágeno: ¿por qué se me cae la piel?


 La ptosis gravitacional, o flacidez de los tejidos faciales, es uno de los signos más comunes de cambios relacionados con la edad que enfrenta una mujer durante la menopausia. Aparece debido a una disminución de la síntesis de colágeno natural por las células y una pérdida de firmeza y elasticidad de la epidermis. Nuestro experto en dermatología le indicará cómo prevenir la pérdida prematura de la turgencia cutánea.

Con el inicio de la menopausia, muchas mujeres notan que la piel se ve diferente a la edad de 20 años: aparecen arrugas, hinchazón, flacidez, pigmentación, rosácea. De hecho, en la edad adulta, los cambios relacionados con la edad se vuelven más notorios; sin embargo, con el paso de los años adquieres un encanto y un encanto especiales, te vuelves más seguro de ti mismo y comprendes claramente las necesidades de tu tipo de piel. Al elegir la atención antienvejecimiento adecuada, puede evitar soluciones radicales al problema, como la cirugía.

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La deficiencia y el desequilibrio hormonal en su organismo provoca multitud de síntomas molestos e incrementa considerablemente el riesgo de patologías graves. La Terapia Hormonal Bioidéntica permite recuperar niveles hormonales óptimos sin las contraindicaciones de las hormonas sintéticas. Su organismo dispone de la dosis óptima en cada momento del día y durante varios meses. También puede tratar la menopausia en Sottopelle, puede buscar menopausia tratamiento en la página web.

La ptosis gravitacional con el inicio de la menopausia, en primer lugar, es causada por la rápida pérdida de colágeno: en los primeros 5 años de cambios hormonales en el cuerpo relacionados con la edad, la pérdida de colágeno alcanza el 30%, luego disminuye gradualmente en un 2% durante los próximos 20 años; ¡es en este período en el que nos centraremos!

¿Cuáles son las consecuencias de una disminución de los niveles de colágeno en la piel?

Durante la menopausia, a medida que el colágeno se degrada, la epidermis pierde firmeza y elasticidad, aparecen volantes, arrugas y ptosis gravitacional. La mujer comienza a notar que los pliegues nasolabiales y las arrugas de la frente adquieren un carácter estático y se hacen más profundos, la punta de la nariz se hunde, aparecen bolsas y hematomas debajo de los ojos y los poros dilatados en un contexto de piel seca y deshidratada. ¿Es posible devolver la apariencia a su frescura y belleza anteriores? ¡No desesperes, hay solución!

Todos estos cambios clínicos externos en la piel de las mujeres posmenopáusicas están asociados con el envejecimiento de las 3 capas de la piel del rostro: epidermis, dermis e hipodermis. La atrofia, la sequedad y la pérdida de grasa corporal son las principales razones de este proceso natural, pero no el más agradable.

La atrofia relacionada con la edad es un adelgazamiento extenso del tejido cutáneo. La pérdida de densidad de los tejidos también interrumpe el intercambio de nutrientes entre la epidermis y la dermis, lo que afecta la calidad de la piel. Dichos cambios se agravan en el contexto de la destrucción progresiva del ácido hialurónico natural en la dermis, lo que conduce a una disminución de la capacidad de las células para retener la humedad, así como a la sequedad y descamación de la piel deshidratada con una secreción de sebo reducida. La epidermis se adelgaza, se vuelve sensible, se irrita, su elasticidad y firmeza disminuyen.

Al final, el óvalo del rostro comienza a deformarse y la imagen se ve cansada. ¿Cómo prevenir o ralentizar el proceso de flacidez de los tejidos faciales?

Aquí hay algunas recomendaciones de nuestra experta, la Dra. Karolina Kopech:

dejar los malos hábitos: fumar y beber alcohol

elija sabiamente un producto antienvejecimiento para el cuidado diario de su piel , dé preferencia a productos con un alto nivel de protección solar SPF;

Consuma una dieta sana y equilibrada

hacer ejercicio regularmente.


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